El 2024 se avizora como un año nuevamente con muchos retos para la agroexportación y todas las empresas que prestan servicios u ofrecen productos esperan que los efectos del Niño Costero sean moderados con el fin de recuperar volúmenes de producción.
Eduardo de la Puente, destacado ingeniero, consultor y experto en desarrollo e introducción de productos B2B en América Latina con foco en soluciones tecnológicas para agroindustria, ex Country Manager de TOMRA Fresh Food, conversó acerca de la etapa de la recta final frutícola y agrícola 2023 y lo que se viene para este 2024 para Perú.
Para de la Puente, el 2024 se avizora como un año nuevamente con muchos retos para la agroexportación y todas las empresas que les prestan servicios u ofrecen productos, esperan que los efectos del Niño Costero sean moderados con el fin de recuperar volúmenes de producción.
Para de la Puente, el 2024 se avizora como un año nuevamente con muchos retos para la agroexportación y todas las empresas que les prestan servicios u ofrecen productos, esperan que los efectos del Niño Costero sean moderados con el fin de recuperar volúmenes de producción.
En este sentido la estabilidad jurídica es fundamental para el desarrollo e inversión, en que se ofrezcan garantías e infraestructura para el desarrollo de actividades productivas. Agrega que en la agricultura es muy importante poner especial cuidado en cómo se planifica esta actividad, cuáles son los factores que podemos controlar y cuáles minimizar, teniendo especial cuidado en la preparación y planificación de las actividades en campo y packing.
¿Cómo está la agricultura y los agronegocios peruanos este 2023 y cómo se proyectan para el 2024?
Durante el 2023 la agricultura peruana mostró una gran resiliencia y capacidad de superación. A inicios de año fue duramente golpeada por las diversas manifestaciones sociales que se produjeron en diversas zonas del Perú ocasionando pérdidas cuantiosas en producto que no pudieron ser exportados a tiempo, amén de las pérdidas ocasionadas para los diversos sectores que prestan servicios de manera directa o indirecta a las empresas agroindustriales los cuales también registraron pérdidas.
A estas manifestaciones se sumó el “Ciclón Yaku” que impacto negativamente en la zona norte de Perú, una de las regiones clave en la producción de la palta y otros productos más.
Luego, y sin previo aviso, los peruanos comenzamos a sentir de manera extraña un cambio en el clima y la temperatura, produciéndose olas de calor donde típicamente se debería dar lo contrario. Así, el “Niño Costero” se hizo presente de una manera muy poco infantil e inocente ocasionando que las altas temperaturas impidieran a los cultivos su normal desarrollo limitándose la producción en un acto genuino de autodefensa, algunos afectados son los arándanos y mangos por mencionar unos pocos.
Cierto es que los precios internacionales de algunos productos suplieron la falta de volumen exportados, pero este escenario no fue el mismo para todos quienes se vieron perjudicados de manera importante.
Así, y entrando a la recta final del 2023, el 2024 se avizora como un año nuevamente con muchos retos para la agroexportación y todas las empresas que les prestan servicios u ofrecen productos.
En términos agrícolas se espera que los efectos del “Niño Costero” sean moderados con lo cual podría darse una recuperación parcial de los volúmenes de producción. Sin embargo, esto se dificultaría mucho dado la poca acción de los gobiernos regionales y central en términos de desarrollo de infraestructura que permita y/o facilite la labor agroexportadora.
A esto último habría que sumarle la necesidad de inyectarle a los inversionistas una dosis de confianza para que sigan apostando por nuestro país y así seguir creciendo ya que la única manera de hacerlo es mediante la inversión privada que es la gran generadora de empleo y progreso.
¿AGAP ha llamado al gobierno a tener mayor estabilidad jurídica de apoyo a la inversión, crees que pasa por ahí sobrellevar la recesión peruana que se señala?
Sin duda la estabilidad jurídica en un país es el principal pilar del desarrollo y la inversión. Ningún empresario, local o extranjero, invertirá en un país que no le ofrece las garantías legales para desarrollas su actividad de manera plena.
Caso similar sucede con los arándanos, las uvas, los mangos y algunos otros cultivos más. Sin embargo, nuestra oferta exportadora sigue siendo limitada / acotada en comparación a otras potencias como nuestro vecino del Sur quien, no solo exportan muchos de los productos anteriormente mencionados, sino también se ha consolidado como el principal productor y exportador de cerezas del mundo así como, manzanas y frutos de carozo por poner un ejemplo.
El Perú, por la rica biodiversidad de sus regiones, nutrido suelo, y abundante agua sobre todo en las zonas altoandinas y amazónicas, nos faculta para ser potencia en la producción de no solo fruto de alto valor agregado como las cerezas y aguaymantos (Golden Berries), sino también de muchos otros como las castañas, camucamu, pitahaya, aguaje, entre otros.
Sin embargo, y tomando como referencia la pregunta anterior, es menester de las autoridades regionales y centrales generar la infraestructura necesaria para poder facilitar al inversionista en su desarrollo. La necesidad de carreteras adecuadas, estructuras de canales de irrigaciones y demás son mandatorios para hacer que la frontera agrícola crezca no solo en la costa, sino también en la sierra y la selva.
2 comenta en “Eduardo de la Puente, destacado ingeniero, consultor y experto…”
segundo
El control de plagas mas importantes de la mosca de la fruta y otros,en los valles interandinos eta total abandonado por el estado SENASA solo se escucha el nombre Por tal forma el productor de los nichos ecologicos no tiene la oportunidad de desarrollar actividad agroexportadora sobre todo en epocas que otros paises no producen.
admin
Muy buen contenido